BBC: Miles de indígenas canadienses llevaron a cabo el
miércoles una jornada de acciones y protestas a lo largo del país en su
larga demanda de mejores condiciones de vida.
Los manifestantes causaron una enorme tranca en
el tráfico de unas de las vías más concurridas de frontera con EE.UU.,
bloquearon otras carreteras y detuvieron los servicios de tren.
El movimiento Idle No More (No Más Desocupación)
ha galvanizado a la mayoría de los 1,2 millones de canadienses
aborígenes, quienes dicen que sus comunidades padecen niveles
desproporcionadamente altos de desempleo, además de abuso de sustancias y
suicidios.
El primer ministro canadiense, Stephen Harper,
prometió reunirse con los líderes nativos la próxima semana para
discutir temas económicos y sociales.