La ciudadanía se desespera, cada día que pasa, por los altos precios y la escasez de los alimentos de primera necesidad, situación que provoca la protesta generalizada.
La falta de alimentos de primera necesidad, sumado a los precios altos, estaría generando un clima de incertidumbre que en el futuro próximo traería riesgos al actual Gobierno nacional y a otros en el mundo por los conflictos sociales que amenazan con estallar, advirtió el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE).
En Bolivia existen más de 2,5 millones de personas en la extrema pobreza y por lo tanto, “el hambre puede derribar gobiernos”; con esta advertencia, el IBCE comunica, de acuerdo con un reciente foro Económico Mundial de Davos (Suiza), que reunió a varios expertos empresarios y economistas, que el incremento de precios está liderando los disturbios, las manifestaciones y la inestabilidad política.
Escasez y alza de precios pondría en riesgo la estabilidad política
Según el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) la inestabilidad en los precios de alimentos de primera necesidad y los básicos estaría generando un clima de incertidumbre que en el futuro próximo traería riesgos al actual Gobierno nacional y a otros en el mundo.
“EL HAMBRE PUEDE DERRIBAR GOBIERNOS”
Por lo que este fenómeno de crisis alimentaria que toca al país, “es algo que realmente puede derribar sistemas de gobierno, como lo hemos visto en Medio Oriente”, publicación del Diario National Public Radio (NPR).
SOBERANÍA ALIMENTARIA
Remarca que enfocarse en la seguridad alimentaria, conllevaría a una trampa, por lo que explica que la seguridad se puede lograr con donaciones e importaciones como ocurrió con el trigo y la harina del grano en mención que -viniendo importada o donada del exterior- volvió vulnerable al país del abastecimiento externo y al mismo tiempo impactó negativamente sobre la producción triguera y la industria molinera.
“El mundo tiene hambre y Bolivia puede ayudar al mundo a producir más alimentos generando para sí soberanía alimentaria y más empleos”, esa fue la conclusión del Foro “Crisis alimentaria mundial –oportunidades y desafíos” el 2008.
El representante de programas de la FAO en Bolivia, Gonzalo Flores, recomendó revisar las políticas asumidas por el gobierno de Evo Morales, entre ellas la apreciación de la moneda nacional que sería uno de los factores del desincentivo en la producción agrícola, debido a que con la baja del dólar los más perjudicados son los exportadores.
“Yo creo que lo que estamos empezando a vivir en Bolivia es la combinación de ambas, unas de largo plazo que se van a combinar con causas de corto plazo que van a tender a agravar el problema sino se toman medidas adecuadas – en este sentido- creo que hemos entrado en un problema que puede ser de tres a cuatro años, va ser difícil salir de esta crisis”, mencionó.
Enfatizó que de nada sirve tener alimentos a precios altos, si la población no cuenta con recursos para comprarlos, por lo tanto, también es necesario la generación de fuentes de empleo en rubros como la minería, construcción entre otros.
- Revisar la política cambiaria
- Apoyar la producción
- Generar empleos
PROYECTO DE GOBIERNOS
- Crédito de $us 20 millones
- Reemplazar productos agrícola escasean.
- Acuerdos con empresarios
El Diario