Las diferentes manifestaciones recordaron los 6 meses de detención de LeopoldoFernández
LA PAZ
El pedido de liberación del ex prefecto de Pando, Leopoldo Fernández y de todos los presos políticos, marcó la jornada de este lunes en Bolivia con reacciones y movimientos sociales en 5 departamentos.
Miles de bolivianos, con pancartas en mano, velas encendidas y vestidos con poleras negras con el lema "liberen la verdad" se congregaron en los lugares más representativos de las ciudades capitales de La Paz, Cochabamba, Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando para exigir la liberación de los que consideran presos políticos del Gobierno del MAS.
LA PAZ EN MARCHA
Al mediodía de este lunes, en la sede de Gobierno, movimientos ciudadanos de esta ciudad, realizaron una vigilia en la plaza de San Pedro donde se encuentra la cárcel.
Allí exigieron libertad y justicia para los detenidos políticos a tiempo de denunciar la violación de los derechos humanos y civiles de la ciudadanía, la habilitación de campos de concentración, el secuestro de los opositores y, entre otros, “el pisoteo” de la Constitución Política del Estado y las leyes.
El grupo, conformado por familiares, amigos y vecinos simpatizantes con Fernández, se congregó en la puerta de la sección “Posta” de la penitenciaría donde a punta de cánticos pidió la liberación de los presos políticos detenidos ilegalmente desde hace seis meses.
La esposa de Leopoldo Fernández, residentes pandinos y ciudadanos en general participaron en la protesta.
La concentración pacífica, sin embargo, fue amenazada por grupos de choque del gobierno del jefe cocalero y presidente del Estado Plurinacional, Evo Morales, los que insultaron y agredieron a quienes pedían que se respete la democracia, los derechos y garantías de los bolivianos pese a la intervención de efectivos policiales.
La esposa de Leopoldo Fernández, Pilar Soria, pidió un juicio justo Fernández a tiempo de indicar que los cargos que pesan en su contra deben ser demostrados por los acusadores, no obstante, desde el 16 de septiembre del año pasado no es sometido a juicio de responsabilidades como le corresponde y tampoco se le permite un debido proceso.
"Para la familia es un día muy triste porque hace seis meses que ya lo tienen encarcelado a Leo, pero estamos con la esperanza y con la fe en Dios de que todo se pueda aclarar", dijo Nery de Fernández, esposa del ex prefecto de Pando.
Recordó que en Bolivia y en todo el mundo se presume la inocencia del imputado mientras se pruebe su culpabilidad, sin embargo, el gobierno a través del ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, “no sólo lo acusó, sino que también lo condenó sin derecho a la más mínima defensa y sin obedecer las órdenes de la Corte Suprema de Justicia”.
El representante del Movimiento Ciudadano “Basta Ya”, Guillermo Paz, declaró que la presencia de los paceños en la puerta de la cárcel tenía como propósito demandar libertad y justicia porque “lamentablemente” La Paz se ha convertido en un campo de concentración donde no se respeta la ley y se viola los procedimientos judiciales.
El representante de La Paz en Acción, Boris Bernal, reclamó por la vigencia de fiscales y jueces imparciales y por la no intervención del gobierno en las decisiones de éstos, así como repudió la acción de grupos de choque pagados y violentos que sirven al Movimiento Al Socialismo (MAS).
“La justicia y la libertad son derechos inherentes a nuestra condición de seres humanos y deben ser respetados por todas las instancias y más aún por los gobernantes”, manifestó.
En horas de la noche, las manifestaciones continuaban en las ciudades mencionadas.
PANDO MOVILIZADO
Una jornada emotiva vivió el pueblo pandino. Tras cumplirse los seis meses de la detención ilegal del prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, en la cárcel de San Pedro en La Paz, la población boliviana expresó su rechazo por los abusos contra los derechos de las personas que comete el gobierno.
El acto principal de desagravio a Leopoldo Fernández se cumplió en Porvernir, municipio el poder ejecutivo a la cabeza de grupos de choque del partido de gobierno provocó uno de los enfrentamiento más sangrientos entre bolivianos.
En los direrentes actos que se llevaron a cabo en la capital pandina estuvieron presentes dirigentes cívicos de Santa Cruz, Beni y Pando, además de los familiares de los presos y perseguidos políticos.
A su turno, el presidente del comité pro Santa Cruz, Luis Núñez, condenó las acciones de amedrentamiento que ejerce el gobierno, a tráves de los militares y los policías. Muestra del acoso militar, fue la militarización de Porvernir, mientras se desarrrollaba el acto de desagravio a Leopoldo.
Una de las hijas de Leopoldo Fernández pidió al gobierno no manipular la justicia ni a los fiscales paceños. "Bolivia está viviendo un estado de injusticia, pero confiamos que la justicia divina se impondrá, por a Dios no lo pueden comprar", afirmó Fernández.
Fueron varios los familiares de los fallecidos el 11 de septiembre y de los perseguidos políticos que expresaron su repudio por los atropellos que comete los militares y los policías.
La población de Porvenir estaba temerosa por la frecuente presencia militar y el hostigamiento contra los familiares de los perseguidos políticos, pero con la llegada de los dirigentes cívicos de Santa Cruz y Beni, muchos expresaron estar fortalecidos por el respaldo de gente que acudió hasta esa localidad.
Al mediodía, la delegación cívica también visitó a los refugiados en Brasilea (Brasil). Los bolivianos que están fuera de frontera contaron que están padeciendo muchas necesidades. No tienen trabajo y viven de la caridad de los brasileños. Uno joven que fue baleado durante el estado de sitio en Pando, contó que su familia tuvo que abandonar Cobija debido al hostigamiento militar.
SANTA CRUZ PRESENTE
En la capital oriental, una marcha pacífica que partió desde la Basílica Menor de San Lorenzo hasta el Palacio de Justicia, donde los marchistas pidieron que se respete la democracia y los derechos humanos.
Decenas de personas acompañaron a los familiares de Leopoldo Fernández, así como organizaciones sociales que se sumaron a esta marcha que causó un fuerte impacto social. La gente pudo recordar que desde hace 6 meses Bolivia tiene presos políticos que el gobierno no quiere soltar.
La esposa, los hijos y los hermanos de Fernández se trasladaron a cada uno de los departamentos en los que se realizaron las marchas, encabezando el pedido de liberación del ex prefecto. Lo mismo hicieron los familiares de los otros presos políticos quienes pidieron la aplicación de la ley.
"NO demandamos beneficios ni nada de eso, sólo queremos que se cumpla la Ley y que nuestros familiares que ahora son presos políticos tengan un juicio justo y transparente donde corresponde", demandaron.